Después me pidió que se la chupara. Me puse de rodillas mientras él quedaba de pié pegado a la pared. Su pollón, largo, gordo y duro, apuntaba directamente a mi cara, como un misil que fuera a estallar contra mí. Los huevos le colgaban como a un toro, y automáticamente me agarré a ellos con una mano mientras me metía la punta de su rabo en la boca, apretando con los labios y lamiendo con la lengua.
Él gimió, y me agarró la
cabeza para que tragara más. Fui metiéndola toda despacio, poco a poco,
sintiendo cada centímetro bajando por mi esófago. Era tan gorda que me cortaba
la respiración, y no hacía más que salivar.
Él resultó ser todo un machote y,
manteniendo mi cabeza bien agarrada para que no pudiera apartarme, me folló la
boca a saco. No puedo creer que ese rabazo entrara y saliera así de mi
garganta. Con su polla en mi boca mi rabo se puso más duro si cabe, y
noté cómo unas gotas de líquido preseminal resbalaban por su punta.
Me folló la boca como quiso,
hasta el fondo. Me la tragaba entera, llegando hasta su vientre y su vello
púbico, notando sus cojones golpeándome con cada movimiento.
Le lamía los huevos, el abdomen y volvía a tragar polla, una y otra vez. Él gemía, cada vez más caliente, y yo estaba poniéndome también cada vez más, con esa tremenda follada de boca que me estaba dando.
Si quieres que se corra ya en tu
cara y boca, pulsa aquí.
Si quieres que ahora te la chupe a ti,
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Si quieres pasar a la follada,
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